Si no dispones de un logotipo en formato vectorial no podrás escalarlo ni utilizarlo en otros tamaños ya que al cambiar sus dimensiones aparecerán los famosos píxeles o en el mejor de los casos te dejarán un logotipo borroso y de baja calidad.
Para eso existe un proceso llamado vectorización, que consiste en trazar de nuevo el logotipo y guardarlo en un formato vectorial como puede ser SVG, EPS o PDF. Este proceso se realiza normalmente en un programa de diseño vectorial como puede ser Illustrator.
Aquí os dejo un videotutorial de cómo realizo este proceso.